Tiroides y fertilidad

tiroides y fertilidad

Cuando hablamos de fertilidad, los estrógenos y la progesterona suelen obtener todo el protagonismo, pero ¿sabías que la tiroides tiene un papel muy importante en el ciclo menstrual y por tanto en la fertilidad?

No solo en el ciclo menstrual y en la fertilidad, si no que también en tener un embarazo saludable y una buena recuperación post parto. En este estudio se muestra el impacto que tiene una tiroides en desequilibrio en la fertilidad y la concepción.

Unos niveles de TSH anormales pueden interferir en la ovulación. Cuando tienes cualquier tipo de desorden en la tiroides, ya sea hipo o hipertiroidismo, y este no se trata, verás que tu fase lutea (la segunda parte de tu ciclo menstrual, después de la ovulación) se ve interrumpida.

Esto está mediado por los niveles de progesterona. Si un trastorno de la tiroides no está regulado, podría haber dificultades para quedarse embarazada porque no habrá implantación. También podría experimentar un aborto espontáneo temprano debido a una implantación incompleta.

tiroides y fertilidad

Reglas irregulares

El hipotiroidismo puede causar sobre producción de prolactina. Niveles altos de prolactina disminuyen la producción de la hormona gonadotropina, y por lo tanto no estimula la producción de las hormonas FSH y LH (esenciales para la ovulación).

A su vez, el hipotiroidismo también puede empeorar los casos de síndromes de ovarios poliquísticos. Empeorando la dominancia estrogénica y la deficiencia de progesterona causando una menstruación irregular.

El hipotiroidismo te deja sin energía, provocando que el cuerpo no pueda hacer el esfuerzo de reproducirse pues se siente que está sufriendo para sobrevivir. Además puede resultar en reglas más cortas y ligeras, pudiendo derivar en amenorrea.

Infertilidad

Además de las dificultades para ovular, cuando se sufre de hipotiroidismo la temperatura basal corporal no es lo suficientemente alta para que el embrión sobreviva.

Complicaciones durante el embarazo

Los desequilibrios de la tiroides son la segunda causa más común de problemas durante el embarazo. En la mayoría de problemas se presenta en forma de hipotiroidismo y puede causar complicaciones como partos prematuros, preclamsia, abortos (1), hemorragias post parto, anemia y desprendimiento prematuro de la placenta.

Complicaciones post parto

Tiroiditis post parto es una enfermedad autoinmune, cuya causa es la combinación del estrés del embarazo, el parto y el periodo post parto. Incluyen estrés psicológico, una alimentación inadecuada, tóxicos ambientales, exposición a frecuencias electromagnéticas, intestino impermeable, demasiado azúcar, infecciones o intolerancia al gluten.

Por ejemplo, la mayoría de las nuevas mamás suelen sentirse más cansadas, con dolores musculares y cambios en sus uñas y cabellos. Si esto se acompaña de otros síntomas como latidos del corazón demasiado rápidos, un cansancio extremo o dolores en las articulaciones, es momento de consultar a un médico.

Muchas mujeres que acaban de tener un bebé sufren de ansiedad y de depresión posparto. Generalmente se les suele recetar medicamentos pero si mirásemos con más detenimiento sus hormonas, veríamos probablemente un alteración del funcionamiento de la tiroides.

Resumen

Como ves, disfunciones de la tiroides pueden complicar la fertilidad, pero no la hacen absolutamente imposible. En primer lugar, la regulación adecuada de los niveles de la tiroides generalmente resolverá los problemas de fertilidad relacionados con la tiroides. Las condiciones autoinmunes pueden complicar el embarazo, pero no siempre, y hay muchas cosas que puede hacer para que tu cuerpo de funciona más equilibrada y más saludable. Recuerda que cada caso es individual. Encuentre un especialista en tiroides y desarrolla un enfoque que funcione para ti y tus necesidades individuales.

¿Te ha gustado el artículo? ¿Sufres disfunciones tiroideas y tienes dificultades para quedarte embarazada? Te leo, puedes escribirme a hola@mariallamas. No te olvides de seguirme en Instagram.

Cómo regular la tiroides de forma natural

como equilibrar la tiroides

Uno de los desequilibrios hormonales más comunes que me encuentro en consulta es el de la tiroides.

Y no es de extrañar, 1 de cada 8 mujeres desarrollan alguna alteración de la tiroides a lo largo de su vida y tenemos 8 veces más posibilidades que los hombres en tener problemas toroideos.

Que sea un problema común, no significa que sea normal, y ninguna mujer ahí fuera debería sufrir con los síntomas. Por eso, espero que este artículo te ayude a resolver algunas de las dudas que tienes y te permita cuidar mejor tu tiroides.

como regular la tiroides

¿Qué es la tiroides y qué función tiene?

La tiroides es una glándula con forma de mariposa y que se encuentra en la zona frontal del cuello. Podríamos decir que la tiroides es el caballo de batalla silencioso, libera hormonas vitales que controlan las principales funciones del cuerpo.

La tiroides secreta estas hormonas con múltiples funciones. Desde regular el latido de tu corazón, a regular la temperatura corporal, la fertilidad, el ciclo menstrual, los niveles de energía, la digestión…

La glándula pituitaria del cerebro, produce la TSH, la hormona estimulante de la tiroides, la cual sirve de mensaje para que la glándula de la tiroides produzca hormonas tiroideas.

La hormona T4 producida por la glándula de la tiroides es una hormona inactiva y que va a parar el 80% de las veces a la sangre. Para que sea efectiva, y haga su función, tiene que convertirse en T3, que es la versión activa de la hormona.

Causas y síntomas de una tiroides en desequilibrio

Se pueden dar diferentes formas de disfunción, en función de si la tiroides sobre trabaja o no tira lo suficiente.

Además de los clásicos hipotiroidismo e hipertiroidismo también puede existir una alteración del bocio.

El bocio es una agrandamiento, inflamación de la tiroides. Puede o no provocar síntomas. Las causas más comunes son la deficiencia de yodo y en Hashimoto y enfermedad de Graves.

Las causas más comunes del hipotiroidismo son:

  • Hashimoto (enfermedad autoinmune)
  • Estrés y disfunción del eje hipotálamo-pituitaria-adrenal
  • Alimentación inadecuada
  • Infecciones previas
  • Intolerancia al gluten o celiaquía
  • Exposición a tóxicos
  • Exposición a EMF
  • Intestino permeable
  • Deficiencia de vitamina D
  • Desequilibrios en el metabolismo del azúcar

Las causas más comunes del hipertiroidismo son:

  • Enfermedad de Graves (enfermedad autoinmune)
  • Toxic thyroid mass
  • Inflamación de la toroides

Qué mirar en la analítica de sangre

Un análisis de sangre es la forma tradicional de poder analizar la salud de la tiroides. Es importante saber que tener resultados «normales» no significa que la tiroides esté funcionando correctamente. hay que observar también los síntomas que puede estar sufriendo la paciente y estudiar la analítica desde un punto de vista integrativo, con la que se tienen en cuenta no solo los rangos de enfermedad, si no los rangos en los que puede haber una disfunción subclínica.

TSH: hormona estimulante de la tiroides. Producida por la glándula pituitaria, da órdenes a la glándula de la tiroides para que produzca hormonas. Si está alta, es como si tu cerebro estuviese gritando a tu tiroides que trabaje más duramente. Lo ideal es que esté entre 0,5 y 2 (<2,5 durante el embarazo), mientras que en medicina convencional proponen entre 0,5 y 5,5mlU/L

T4 libre: forma inactiva de la hormona tiroidea. Nos muestra cuanta hormona la tiroides está produciendo. Lo óptimo es que esté entre 1,4 y 1,8. Será bajo en casos de hipotiroidismo.

T3 libre: es la T4 convertida en forma activa. La cual es utilizada por nuestras células para hacer sus funciones. Rango saludable 3,5 o más.

T3 reversa: frena la conversión de la hormona tiroidea, nos indica la existencia de estrés. Lo ideal es que esté por debajo de 15. Anticuerpos tiroideos: indican si hay condición autoinmune. El objetivo es que sea negativo.

Disruptores de la tiroides

El hecho de que las mujeres somos cíclicas, más el uso de las hormonas anticonceptivas, nos hacen tener 8 veces más probabilidades de sufrir una disfunción de la tiroides que los hombres. Mientras que no podemos evitar lo primero, sí que hay un montón de disruptores de la tiroides que pueden eliminarse.

Pastillas anticonceptivas

Las hormonas que se utilizan en estos medicamentos no son iguales a las hormonas que nuestro cuerpo produce. Son similares, pero no las mismas.

Los estrógenos artificiales de las pastillas estimulan el receptor de estrógenos pero el mensaje está distorsionado y pueden terminar atascando el receptor. No funcionan en el cuerpo de la misma forma que los estrógenos o la progesterona.

Las altas dosis de estrógenos en las pastillas incrementa la actividad de la TBG (globulina transportadora de tiroxina), que se une a la hormona tiroidea. Más TBG significa menos niveles de hormona tiroidea libre para ser usada por el cuerpo.

Los anticonceptivos también roban al cuerpo de nutrientes esenciales como el magnesio, selenio y zinc. Estos minerales son esenciales para que la tiroides trabaje de forma adecuada.

Toxinas

Hay millones de toxinas que están en el ambiente y que hace 100 años no estaban. Últimos estudios demuestran que los químicos tóxicos no son buenos para la salud tiroidea.

La tiroides es muy sensible a los tóxicos, especialmente a aquellos que afectan al yodo disponible. La mayoría de estas toxinas causan estragos en el sistema endocrino al alterar su función normal. Actúa como copias de nuestras hormonas y esto confunde al cuerpo, interrumpiendo el sistema de comunicación y causando que el cuerpo deje de producir hormonas naturales.

Dietas pobres en nutrientes

Tu tiroides necesita de nutrientes como el yodo, selenio, magnesio, cobre o zinc, para producir suficiente hormona tiroidea. Si no consumes suficientes nutrientes en tu alimentación, o no los absorbes bien por problemas intestinales como una disbiosis, estarás privando a tu tiroides de componentes claves que necesita para funcionar, lo que lleva a un trastorno de la tiroides.

Disbiosis

Cuando tu flora intestinal está alterada, los alimentos no se absorben bien y nuestra pared intestinal dejará pasar más moléculas indeseadas al intestino, incrementando así la inflamación del cuerpo. Esto puede provocar una respuesta inmune y si no se trata llegar a sufrir condiciones como la tiroiditis de Hashimoto.

Gluten y cereales

Una primera estrategia para mejorar la tiroides puede ser evitar el gluten y posiblemente otros cereales, ya que pueden penetrar la pared intestinal provocando una respuesta inmune en el cuerpo. Personas con una celiaquía no tratada tienen tres veces más posibilidades de sufrir una disfunción tiroidea.

Estrés

Cuando estamos estresados, nuestro eje HPA (hipotálamo-pituitaria-adrenal) instruyen a nuestros adrenales para que produzca cortisol. Este cortisol afecta a la glándula pituitaria y se vuelve más lenta enviando sus señales. La produción de TSH entonces se reduce haciendo que no le llegue la señal a la tiroides de que se necesitan más hormonas tiroideas. Esto puede resultar en una reducción de los niveles de hormonas tiroideas, lo cual puede llevar a sufrir hipotiroidismo.

Cómo regular la tiroides de forma natural

Mejora la función intestinal

Como he comentado anteriormente, la disbiosis puede interferir con la función tiroidea. Para mejorar el funcionamiento intestinal comienza a introducir alimentos fermentados y probióticos de forma diaria, limita el consumo de azúcar, gluten y cereales, e incrementa la ingesta de fibra.

Gestión del estrés

Como sabes ahora, el estrés crónico puede provocar una reducción en la producción de la hormona tiroidea provocando hipotiroidismo. Aprende herramientas para gestionar el estrés e incluye algunas tan sencillas como las respiraciones profundas, yoga, meditación, lectura, tener una rutina matinal y otra nocturna, disfrutar de tiempo de calidad con amigos y familiares, baños de sales epsom, aceites esenciales…

Ayuda las vías de desintoxicación

Xenoestrógenos como el BPA, se unen a las células de nuestro sistema inmune y endocrino, a la vez que a nuestras glándulas tiroideas, empeorando su función. Estas toxicas a menudo se encuentran en productos convencionales de belleza, productos de limpieza e higiene, plásticos, tickets de la compra…

Sustitúyelos por opciones más naturales. comienza por aquellos que utilizas cada día, como el gel de limpieza facial, desodorante, pasta de dientes…

Mejora tu salud menstrual

La dominancia estrogénica tiene un efecto negativo en la tiroides y anomalías en la tiroides pueden afectar negativamente en tu ciclo menstrual. Lo ideal sería mantener tus niveles de estrógenos equilibrados y así evitar un círculo vicioso entre tiroides y ciclos irregulares.

Prueba anticonceptivos no hormonales. Limita la exposición a disruptores endocrinos, reduce el consumo de alcohol (que impide al hígado desintoxicarse), evita antibióticos para mantener una buena flora intestinal.

Disfruta de una alimentación rica en nutrientes

Los siguientes alimentos son ricos en nutrientes esenciales para la función óptima de la tiroides:

Yodo: alimentos ricos en yodo ayudan a la producción de hormonas tiroideas y regular el metabolismo. Además de la sal yodada, come alcachofas, utiliza algas en la cocina, huevos ecológicos, y piña.

Selenio: nos ayuda a mantener la producción. Lo encontramos en huevos ecológicos, vieriras, shiitake, maitake y cremini, ajo, semillas de girasol. Pero la forma más sencilla de incrementar los niveles de selenio es consumir 2-3 nueces de Brasil al día.

Ácidos grasos omega 3: son esenciales para la implantación de los óvulos si estás intentando quedarte embarazada y juega un papel importante en la salud de la tiroides. Disfruta de salmón, sardinas, caballa, trucha. Añade semillas de lino o chía a tu porridge, tu yogur o tus batidos.

Manteca o aceite de coco: grasas saturadas crudas se convierten rápidamente en energía y ayudan a regular la función tiroidea. Intenta añadir una cucharadita en tus batidos, porridge o sobre una tostada.

Hierro y cobre: tener unos buenos niveles de hierro ayudarán a producir más hormonas tiroideas y el cobre apoya la función del hipotálamo, el cual se comunica con tu tiroides y otras hormonas para asegurarse que todo funciona bien. Lentejas, espinacas, cacao, judías, carne roja de pasto, huevos eco, brócoli y semillas de calabaza son ricas en hierro. La mayoría de frutos secos, semillas, pescado y cacao son una buena fuente de cobre.

¿Y qué pasa con los alimentos bociógenos?

Los alimentos bociógenos, con alimentos con compuestos bociógenos. Estos compuestos tienen la característica de interferir con la glándula de la tiroides y suprimen la liberación de la hormona tiroidea. Con el fin de contrarrestar esta producción inadecuada, la tiroides se agranda y se forma lo que conocemos como bocio.

¿Dónde los encontramos?

Principalmente en las crucíferas (brócoli, coliflor, repollo, coles de Bruselas y resto de coles) y en la soja. Otros alimentos que también los contienen pero en menor medida son las espinacas, nabo, rúcula, yuca, boniato, mijo, maíz, melocotón, fresas, peras o piñones.

Cuando existe una disfunción tiroidea, un consumo excesivo de alimentos bociógenos, acompañados de una falta de yodo y selenio pueden empeorar la sintomatología.

A pesar de ello, son alimentos con tantos beneficios que no se recomienda la retirada completa. Para evitar esos compuestos bociógenos lo que podemos hacer es cocinar todos esos alimentos al vapor, salteados, hervidos, a la plancha u horneados, si los queremos tomar en un batido (por ejemplo un batido con col), puedes blanquearlo antes de triturarlo en el zumo.

Si piensas que sufres de un desequilibrio tiroideo, te recomiendo que busques apoyo profesional que esté especializado en salud hormonal femenina y practique una visión holística para abordar el problema desde raíz. Si necesitas ayuda con tu alimentación para que tu tiroides funcione correctamente, no dudes en escribirme a hola@mariallamas.

Virus del papiloma humano (VPH) y alimentación

virus del papiloma humano

El virus del papiloma humano es una de las infecciones de transmisión sexual (ITS) más comunes. De hecho, prácticamente todo el mundo sexualmente activo lo ha contraído en algún momento de su vida.

En este artículo detallaremos curiosidades sobre este virus y la relación entre el vph y alimentación.

¿Qué es el virus del papiloma humano (VPH)?

El VPH es un conjunto de más de 200 virus. Se transmite mediante relaciones sexuales vaginales, anales u orales. Suele asociarse a mujeres, pues somos las que más signos de síntomas desarrollamos, pero los hombres también pueden ser portadores y sufrir síntomas.

Dentro del VPH hay muchos tipos y variantes, están:

  • Los de riesgo bajo, que son la mayoría y suelen desaparecer por si solo sin producir ningún problema de salud, aunque a veces provocan verrugas vaginales. Estas verrugas son bultitos, más grandes o pequeños, planos o abultados, que suelen ubicarse en el tracto genital inferior (cérvix, vagina, vulva, periné y zona perianal), ano y zona de la garganza. Si proliferan y no se extirpan pueden dar lugar en lesiones cutáneas más graves.
  • Los de riesgo elevado: si persisten y no desaparecen pueden causar problemas para la salud como cáncer.

Lo bueno es que existe una vacuna que puede reducir mucho el riesgo de contraer VPH. Por supuesto también podemos disminuir la probabilidad de contraerlo o incrementar las posibilidades de reversión del VPH con unos buenos hábitos de vida que apoyen nuestro sistema inmune y nuestra salud.

vph y alimentación

VPH y cáncer de cuello uterino (cáncer cervical)

El cáncer de cuello uterino es segundo cáncer más frecuente entre las mujeres y uno de los que presenta mayor índice de mortalidad. Un 99% de las veces es causado por el virus del papiloma humano. Aunque El cáncer de vulva, vagina, pene, ano o incluso de garganta también pueden ser causados por el VPH.

Hay que tener claro, que contagiarse de VPH tiene una baja probabilidad de derivar a un cáncer. El 90% de las infecciones son transitorias, pues como hemos dicho hay muchos tipos de VPH. Unos pueden causar verrugas genitales, y estos tipos no son los mismo que pueden causar cáncer.

VPH — 1% desarrollará cáncer, del 20% de las mujeres infectadas

Cáncer de cuello uterino — 99% de los casos es por VPH

Factores de riesgo que influyen en la persistencia del VPH

Los principales determinantes del riesgo de persistencia de la infección por el VPH y desarrollo de lesiones pre-malignas y malignas son:

  • El geneotipo viral, siendo los más agresivos el 16 y 18.
  • La carga viral
  • La inmunodepresión, especialmente la debida a la infección por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
  • El tabaco
  • La utilización prolongada de anticonceptivos orales
  • La elevad paridad
  • La co-infección con algunos microorganismos de transmisión sexual como la Chlamydia trachomatis o el herpes genital (VHS-2)
  • Obesidad
  • Alteración de la microbiota vaginal

Vacuna VPH y pruebas de rutina para la prevención

La vacuna contra el VPH protege contra la infección por nueve tipos de VPH: los dos tipos de riesgo bajo que causan la mayoría de las verrugas genitales y los siete tipos de riesgo alto que causan la mayoría de los cánceres relacionados con el VPH.

La vacuna además de proteger a una misma, también disminuye la transmisión a otras personas.

Todos los niños y niñas de 11 o 12 años deben vacunarse. Sí, chicos también pues como he citado anteriormente, tanto hombres como mujeres pueden ser portadores del virus del papiloma humano. A estas edades la vacuna consta de 2 dosis. Si la vacuna comienza a administrarse con 15 años o más y hasta los 26 años, entonces se darán tres dosis.

¿Qué pasa si soy mayor de 27 años?

Es posible vacunar a adultos de entre 27 y 45 años, aunque el beneficio es menor pues hay más probabilidad de que ya se hayan expuesto al virus.

Pruebas rutinarias para la prevención del virus del papiloma humano

No existe una prueba concreta para determinar si una persona tiene o no el VPH. De hecho, la mayoría de personas con VPH no saben que están infectadas y nunca presentan síntomas. Las que descubren que tienen el VPH suele ser porque en una revisión ginecológica presentan verrugas genitales o en la citología sale presencia de células anómalas. Por esto es tan importante las revisiones frecuentes.

La citología cervical es una prueba sencilla que no precisa de preparación alguna. Se toma una muestra de células que son analizadas con microscopio para detectar alteraciones celulares que puedan indicar alguna infección por VPH. Si hay infección, habrá algún cambios morfológicos, pero estos cambios también pueden producirse por otros organismos, o cuando existen cambios en la flora vaginal normal.

La prueba de VPH-AR aporta mayor sensibilidad que la citología para la detección de CIN3 (lesión premaligna de alto grado) y es más reproducible, aunque tiene menor especificidad , sobre todo en mujeres menores de 30 años donde la prevalencia de la infección transitoria es alta. Mientras que es más eficaz en mujeres mayores de 30 años.

Lo que sí que existe es la prueba de Papanicoláu que detecta si hay cáncer de cuello uterino y a través de esta puede saberse que hay VPH.

Protegerse, prevenir y revertir el VPH

Como he comentado, en la mayoría de los casos, la infección se resuelve sola y ni nos hemos enterado que hemos tenido el VPH.

Si nos enteramos que estamos infectadas, lo mejor es reforzar nuestro sistema inmune para que pueda superarlo. Esto lo hacemos mejorando las defensas, lo que provocaría un debilitamiento del virus y con ello desaparecerían los síntomas como las verrugas. Por lo que parar curar el vph tenemos que mejorar nuestra alimentación, practicar actividad física, no fumar y cambiar otros hábitos de vida que refuerce nuestro sistema inmune.

Hay que tener en cuenta que estas verrugas también se podrían tratar con medicación o incluso cirugía, aunque esto no implica que el virus desaparezca.

VPH y alimentación

Ya sabemos que nuestra alimentación tiene un papel fundamental en nuestra salud, y aunque no es lo único importante, tomar más o menos de
X alimentos puede influir mucho en el riesgo de contraer ciertas enfermedades.

Una alimentación con alto potencial inflamatorio (rica en grasas saturadas y trans, azúcares añadidos y sodio) y un estilo de vida sedentario, están asociadas a un peor control de las infecciones por VPH y con el desarrollo de cáncer de cuello uterino, particularmente entre las mujeres que tienen una infección por VPH.

Si hablamos del cáncer cervical y VPH, estudios demuestran que:

  • una baja ingesta de frutas y verduras están asociadas a 3 veces más riesgo de neoplasia intraepitelial cervical (NIC) de clase 2 y 3 en mujeres con una alta carga viral del VPH. El consumo de 100g adicionales de fruta y verdura pueden reducir un 17% el riesgo de cáncer de cuello uterino escamoso invasivo (ISC).
  • Niveles séricos bajos de vitamina A, vitamina C y licopeno están asociados con el riesgo de NIC de clase 3.
  • Mujeres con concentraciones más altas de folato fueron menos propensas a ser diagnosticadas con CIN2+, especialmente cuando los niveles de vitamina B12 están en rango.

Dejando los estudios a un lado, vamos a ver qué nutrientes añadir a nuestro plato para ayudar al organismo a eliminar el VPH y con ello reducir el riesgo de desarrollar cáncer cervical, reduciendo la tasa de transformación de células cervicales a células cancerosas.

CRUCÍFERAS

Ricas en I3C o indole-3-carbinol y sulforafano, ayudan a reducir el estado avanzado de la displasia y su progresión a cáncer cervical.

Apuesta por brócoli, coliflor, coles de Bruselas, kale, espinacas, berros, rúcula, acelgas… 

Te reto a incluir cada día un verde en alguna de tus comidas. Espinacas en un batido, brócoli a un salteado con gambas y por qué no al batido también, ensalada de rúcula o berros… opciones hay miles.

POLIFENOLES

Grandes antioxidantes con propiedades antiinflamatorias que son efectivos para revertir la displasia. Los polifenoles inhiben la proliferación de las células del VPH mediante la inducción de la apoptosis, la detección del crecimiento, la inhibición de la síntesis de ADN y la modulación de las vías de traducción de señales. Arándanos, avellanas, nueces pecanas.

Encontramos también el resveratrol: incluso una dosis baja de tratamiento con resveratrol ha demostrado en un estudio in vitro que cambia la expresión del gen del cáncer en las células positivas tanto para el VPH 18 como para el VPH 16, es decir que detiene el ciclo celular de crecimiento.

Mención especial tiene el te verde con el polifenol más potente (EGCG).estudian demostrado que la suplementación de dicho antioxidante responde positivamente contra la displasia cervical. E incluso en forma de pomada ha sido aprobada para tratar las verrugas genitales.

BETACAROTENOS

Se transforman en vitamina A en tu cuerpo. Protege contra el crecimiento de lesiones en el cervix. Boniatos, zanahorias, calabaza, papaya.

El licopeno es un carotenoide que da a las frutas y verduras el color rojo característico. Lo encontramos en fresas, tomates, sandía. ayuda a
proteger las células para que no sufran daños previniendo así el cáncer.

VITMINA C

Una de los principales antioxidantes del cuerpo. Una ingesta alta de vitamina C disminuye el riesgo de displasia cervical.
No solo la encuentras en los cítricos, si no también en los pimientos rojos, kiwi, fresas, melón y brócoli.

Ensalada con fresas y mucho verde

Ensalada mediterránea con garbanzos

Batido de cítricos y kiwi

FOLATO

Si tomas la píldora, bebes alcohol, tomas ibuprofeno lo más probable es que tengas insuficiencia de folato. Estos niveles bajos están ligados a displasia cervical. Puedes optar por suplementación siempre regulada por un profesional pero también consumir suficientes aguacates, garbanzos, lentejas, fresas, naranjas o espinacas.

Lentejas con setas de temporada

Dhal con brócoli

Estofado de calabaza, kale y judías

CORIOLUS VERSICOLOR

Reishi, shiitake, cordyceps y coriolus. Inmunoregulador, mejorando la respuesta al VPH y revertiendo las primeras etapas del cáncer cervical. En un estudio con mujeres con displasia cervical, 9 de 10 mujeres que se suplementaron con 3000mg de coriolus versicolor dieron negativo en VPH comparadas con 1 de 12 a las que se le dio placebo.

¿Y cómo ponemos todo esto en nuestro plato?

Desayuno: copos de avena con bebida almendra y frutos rojos y papaya (polifenoles, licopeno y betacaroteno)

Comida: Quinotto con calabaza, shiitake y espinacas (betacaroteno, coriolus versicolor, folato)

Cena: Salteado  de brócoli con salmón, avellanas y aliño de naranja. (I3C, polifenoles, vitamina C, folato)

Snacks: fruta fresca o guacamole con palitos de zanahoria y pimiento rojo, o frutos secos o un te verde.

Tener VPH puede parecer un mundo pero en la mayoría de casos se queda en una infección que pasa desapercibida y que desaparece con el paso del tiempo (gracias a nuestro super sistema inmune!). Para aquellas pocas veces en las que persiste, puede abordarse desde diversos ámbitos, siempre acompañada de un profesional.

Lleva unos hábitos de vida sana, sin fumar, moviéndote, reduciendo el estrés y siguiendo una alimentación equilibrada, rica en vitaminas y fibra. Todo ello repercutirá en la salud general y, por tanto, mejorará el estado de tus defensas y te hará más fuerte frente a enfermedades, ayudando a protegerte contra el VPH.

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Endometriosis y Salud Digestiva

La endometriosis se define estrictamente como tejido similar al endometrio que se encuentra fuera del útero. Si bien normalmente reside en el sistema reproductivo, también puede propagarse a los intestinos, la vejiga y, con mayor frecuencia, al peritoneo (revestimiento de la cavidad abdominal)

Es una afectación ginecológica que la padecen un 15% de las mujeres en todo el mundo.

Es una de esas enfermedades que se llevan en silencio, y la normalización inadecuada de sus síntomas hace que sea una de las enfermedades que más tarda en diagnosticarse.

Las mujeres con endometriosis sufren muchos síntomas: dolores pélvicos muy fuertes⚡, dolores durante la regla💥, reglas abundantes☄️, cansancio 🚶🏻‍♀️, migrañas🤯… ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀
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Entre toda la sintomatología que sufren, en este artículo, me gustaría que nos enfocásemos en la relación entre endometriosis y la salud digestiva.

Endometriosis y salud intestinal

Las mujeres con endometriosis están predispuestas a tener mayor desequilibrio bacteriano en el intestino.

El sistema inmune se comporta de forma diferente en mujeres con endometriosis, y tienen mayores bacterias gram negativas las cuales incrementan la inflamación vía lipopolisacáridos.

¿Por qué esto importa? Porque el 70-80% de tu sistema inmune está en tus intestinos. Lo que sucede ahí regula la inflamación.

Los síntomas gastrointestinales entre pacientes con endometriosis incluyen dolor abdominal, distensión abdominal, náuseas, estreñimiento, vómitos, evacuaciones intestinales dolorosas y diarrea.

Las digestiones son más complicadas, con inflamación y menor producción de jugos digestivos, esenciales para una buena digestión.

Por estos síntomas, a menudo, las mujeres con endometriosis pueden ser mal diagnosticadas con SII (intestino irritable), enfermedad de Crohn o apendicitis cuando sus síntomas gastrointestinales en realidad se deben a la endometriosis.

La fatiga y el dolor crónico, no lo pone fácil, perjudicando nuestros hábitos alimenticios.

El dolor constante puede hacer que no comas regularmente, fomentando un metabolismo y una tiroides lentos, que da lugar a una baja producción de ácido estomacal.

Esto hace incrementar el riesgo de SIBO (sobrecrecimiento de bacterias del intestino delgado). Si además existen lesiones endometriales en los intestinos tendremos un estreñimiento asegurado.

Además, el exceso de estrógenos exacerba la endometriosis, y si tu intestino no está feliz, no eliminaremos bien los estrógenos y se volverán a reabsorber de los intestinos.

Por esto, para gestionar la endometriosis no solo vale con equilibrar tus hormonas.
Tienes que ir más allá y asegurarte que tu sistema inmune y tus intestinos están bien.

¿Cómo cuidar tu microbiota para favorecer tu digestión, tu sistema inmune y con ello reducir los síntomas de la endometriosis?

Por eso, favorecer tu digestión puede ser un punto excelente donde comenzar para luchar contra la endometriosis.

  • Retira alimentos que desencadenan una respuesta inflamatoria y negativa de tu sistema inmune (procesados, azúcares, grasas transgénicas)
  • Sigue una alimentación antiinflamatoria, rica en ingredientes de origen vegetal, proteínas de calidad, fibra y grasas saludables.
  • Comienza tus comidas consumiendo verduras amargas, producirás más jugos digestivos y mejorarás la descomposición y absorción de los alimentos. Cuando están descompuestos se mueven mejor a través de los intestinos favoreciendo un buen tránsito intestinal y con ello la eliminación del estrógeno del cuerpo cosa que interesa priorizar en mujeres con endometriosis.
  • La hidratación también es clave para la digestión. No vale solo con beber agua, es importante que esta tenga suficientes electrolitos (minerales). Aprovecha a tomar entre comidas caldo de huesos o bebidas enriquecidas con electrolitos (aquarious no vale!). El tomar algo además te ayudará a combatir esa fatiga, regular tu energía, el equilibrio de azúcar en la sangre y el metabolismo.
  • Chequea tu salud intestinal y hazte pruebas de microbiota si es necesario para ver cómo están esas bacterias.
  • Considera probar omega 3, zinc, cúrcuma, berberina y un probiótico especídico (puede ayudar a reducir las gram negativas)

¿Sufres de endometriosis y te has sentido identificada?
Asesorías dietéticas disponibles para mejorar tus síntomas y equilibrar tus hormonas! Escríbeme a hola@mariallamas.com

Cómo potenciar la fertilidad de forma natural

potencia la fertilidad

Actualmente muchas parejas tienen dificultades para quedarse embarazadas.

Si estás en esta situación o has estado ahí o conoces de alguien que está pasando por ello, sabrás cómo de devastadores pueden ser los efectos de infertilidad.

Mientras que los problemas para quedarse embarazada están en aumento (gracias tóxicos, gracias anticonceptivos, gracias estrés), lo bueno es que se puede contrarrestar los efectos dañinos de estos obstáculos de forma sencilla y natural.

Ya sea que estás intentando activamente quedarte embarazada o sueñas con ser madre en un futuro, puede seguir estos consejos para potenciar tu fertilidad.

Lo mejor, es que cualquier paso que des para mejorar de forma natural tu fertilidad y equilibrar tus hormonas, hará que mejore tu salud en general de muchas formas. menos dolores premenstruales, más energía, mejor humor, piel radiante, pelo más fuerte, mejor descanso…

Pasos para optimizar la ovulación y potenciar tu fertilidad

1. Registra tu ciclo menstrual

Si quieres optimizar tus hormonas y tener más probabilidades de quedarte embarazada, necesitas comenzar a registrar y entender tu ciclo menstrual. Haciéndolo podrás calcular tus días fértiles.

Hay 4 fases, y mientras la fase ovulatoria es tu ventana fértil, todas las fases son importantes y necesarias para que se de un embarazo.

Puedes utilizar una aplicación para registrarlo, es sencillo y te permite ver claramente si hay algún patrón o desequilibrio. Es importante que registres la temperatura basal, que se incrementa ligeramente después de la ovulación y mantenerse alta hasta que comiences la menstruación. Observa el moco cervical, cambia en función de la fase del ciclo, puede ir desde más seco, a más cremoso o gelatinoso.

2. Practica sexo más a menudo

Para incrementar la probabilidad de quedarte embarazada, deberías tener relaciones sexuales una vez cada dos días durante la ventana fértil (2 días antes de ovulación, 2-3 días durante ovulación, 2 días después de la ovulación).

3. Evita lubricantes convencionales

Pueden disminuir la motilidad y disponibilidad del esperma. Si necesitas una opción más segura, prueba un mezcla de aceites minerales.

potenciar la fertilidad

4. Disminuye el consumo de cafeína y alcohol

Si puedes, es interesante moderar o limitar el consumo de cafeína y alcohol durante la fase ovulatoria.

Tus niveles de estrógenos están en sus máximos y tu hígado necesita todo el apoyo posible para elimínalos adecuadamente (verduras como la remolacha, brócoli o las acelgas te ayudarán). Si tu hígado se satura, lo que pasará será que el estrógeno volverá de nuevo a tu torrente sanguíneo, dando lugar a una dominancia estrogénica, sinónimo de síndrome premenstrual intenso y dificultad a la hora de quedarte embarazada.

5. Come alimentos densamente nutritivos

De forma habitual! Como los estrógenos están por las nubes en la fase ovulatoria, es interesante comer alimentos que ayuden a la desintoxicación del hígado.

Crucíferas como las coles de Bruselas, brócoli, kale, col, coliflor, acelgas serán tus mejores amigas en esta fase del ciclo. Puedes disfrutarlas en un batido verde como este.

Ligeras pero nutritivas opciones como la quinoa, arroz integral, frutos rojos, pescado azul son también geniales durante este periodo, pues tu apetito tiende a suprimirse, pues tus hormonas pasan de «alimentarse y buscar comida, al modo deseo sexual).

Evita alimentos pesados que te dejan sin energía y te quitan el buen humor.

6. Añade adaptógenos

Maca es conocida por incrementar la líbido y la fertilidad.

Trébol rojo ayuda a incrementar el flujo cervical y lubricar de forma natural. Puedes tomarlo en infusión.

Shatavari, potencial la producción de LH (hormona luteinizante que ayuda a regular el ciclo menstrual y la producción de óvulos ). También mejora la líbido durante la ovulación. Tómalo en infusión durante la menstruación o hasta que la ovulación comience, luego para hasta el siguiente ciclo.

7. Practica ejercicio

La fase ovulatoria es ideal para practicar ejercicio de alta intensidad, pero asegúrate de reducir el ritmo después de esta fase, pues el cuerpo necesita energía para una posible implantación.

En esta fase puedes sentir un poco de molestia en la zona del bajo abdomen, baja espalda, posturas de yoga de apertura de caderas pueden ayudarte.

8. Hidrátate

El moco cervical, el cual ayuda al esperma a encontrar el óvulo, disminuye cuando no bebes suficiente agua. Tu digestión se ralentiza en esta fase y puedes sentirte más hinchada. Por lo que hidratarte bien puede ayudar a que todo esté en equilibrio y potenciar la fertilidad.

9. Minimiza la exposición a tóxicos

Tanto tu como tu pareja, pues también afecta a la fertilidad masculina, deberíais evitar fumar y minimizar la exposición a tóxicos si quieres quedarte embarazada. Estos tóxicos disminuyen el número y calidad de los espermatozoides, actúan como disruptores endocrinos y están unidos al incremento de abortos o embarazos ectópicos.

Algunas formas de reducir la exposición a toxinas es comenzar a utilizar tuppers de cristal en vez de plástico, comprar orgánico si es posible y busca por productos de limpieza, cosmética e higiene más naturales.

Mientras que tener relaciones sexuales durante la fase ovulatoria es esencial para quedarse embarazada, entender cómo funciona tu cuerpo y tus hormonas durante esta fase fértil, te permitirá potenciar la fertilidad e incrementar las posibilidades de quedarte embarazada.

Espero hayas encontrado este artículo de ayuda. Si necesitas un apoyo más personalizado no dudes en escribirme un email a hola@mariallamas.com

Fórmula de batidos para tus hormonas

Como dietista y foodie, me tomo mis batidos muy en serio. Sí, porque no solo pienso en un batido rico y delicioso si no que aprovecho la oportunidad para cargarlos bien de nutrientes que además favorezcan el buen funcionamiento de mis hormonas.

Un batido hormone-friendly debe seguir las siguientes premisas:

  1. Contener una buena variedad de nutrientes que mantengan el azúcar en sangre estable, que optimice el funcionamiento de mis hormonas y que me deje saciedad.
  2. Debe evitar azúcares refinados, químicos u otros ingredienets inflamatorios que desequilibren el equilibrio hormonal.
  3. Debe ser rico, cremoso y delicioso, si no, ¿qué sentido tiene?

Te preguntarás, me parece estupendo, pero ¿cómo puedo añadirlo a mi batido?

Muy sencillo, más que tener una receta concreta de batido, me gusta seguir una fórmula, una guía de componentes que me permita ser flexible y poder adaptarla a los ingredientes de temporada, a los que tenga disponibles o a los que más me apetezcan, y que aun así promulgue con esos principios básicos.

Estos son los pasos que hago para prepararme un delicioso batido que le guste a mis papilas gustativas y a mis hormonas también:

Fórmula de batidos que regule tus hormonas

Utiliza una bebida vegetal de calidad o agua de coco.

Los aceite de girasol, de colza o de soja son de los más utilizados en las bebidas vegetales comerciales, pero lamentablemente son aceites inflamatorios y disruptores endocrinos. Además solemos encontrar entre sus ingredientes emulsionantes como la lecitina de soja o gomas (guam o aguar) para darle textura y alargar la vida útil del producto.

Te animo a leas las etiquetas antes de comprarlas y busques por opciones de bebidas vegetales de mejor calidad, a mi me gustan algunas de la marca Ecomil, Oatly o Monsoy. Si ves que tienen azúcares añadidos o ingredientes raros, evítalas.

Por supuesto, siempre puedes preparar el batido para tus hormonas con tu propia bebida vegetal u optar por utilizar agua de coco o agua natural.

Añade una buena fuente de proteína, grasa y fibra

Si quieres que tu batido sea nutritivo y equilibrado, además de optimizar la salud de tus hormonas, debes asegurarte que tiene buenas fuentes de proteína, grasa y fibra.

Esta combinación aporta a tus hormonas los macronutrientes que necesita para funcionar mejor, además de que ayuda a mantener el azúcar en sangre estable. Por otro lado también hace que tus intestinos envién la hormona CCK y hormona de saciedad, para que tu cuerpo se de cuenta de que estás llena y te aporte energía durante las siguientes horas.

Como fuente de proteína puedes optar por colágeno o proteínas en polvo a base de cáñamo, guisante o garbanzos. Para aportar una buena dosis de grasa saludable añado aguacates, frutos secos, semillas o cremas de estos. Y para un extra de fibra añade semillas de lino, chía o prebióticos en polvo.

Incorpora verduras, frescas o congeladas

Además de incorporar fibra también te ayudarán a incrementar la ingesta total diaria de verduras (es una excelente forma de añadirlas a tu día a día sin que te des cuenta).

Nos proporcionan antioxidantes, fitoquímicos que previenen de la inflamación, reducen los niveles de estrés. También nos aportan micronutrientes necesarios para nuestro intestino, que está directamente unido a nuestra función hormonal.

Me gusta tener diferentes opciones en el congelador listas para utilizar. Hoja verde como espinacas, kale, pero también brócoli, coliflor (no te preocupes que no afectará al sabor), calabacín, zanahoria, remolacha, boniato, calabaza o pepino.

Añade fruta

Generalmente los batidos que pedimos en cualquier bar o que encontramos en el super, están cargados de demasiada fruta y a veces hasta de azúcares. Lo hacen para añadirle ese toque super dulce para atraer a nuestras papilas gustativas. Pero demasiado tanta fruta (puede llegar hasta 3 y 4 piezas de fruta por batido) puede alterar nuestro azúcar, que produzcamos más cortisol y estrógenos (hola dolor menstrual!)

En vez de basar tu batido en solo fruta, opta por una pequeña cantidad, por ejemplo medio plátano o un puñado de arándanos.

Añade ingredientes que mejoren tu salud intestinal

Esta parte no es esencial, pero puede hacer que tu batido sea mucho más rico y divertido, además de aportar un extra de nutrientes.

Yogur de coco con sus probióticos que ayudan a nuestras buenas bacterias intestinales, además de polen de abeja que ayudan al metabolismo y la función tiroidea.

Potencia con super alimentos

Me gusta centrarme en lo esencial, que suele ser lo más económico, accesible y realmente importante. Pero porqué no, si podemos también está la posibilidad de utilizar esos super alimentos en ocasiones concretas o puntuales.

Cúrcuma para reducir inflamación, canela para equilibrar el azúcar en sangre, jengibre. También adaptógenos como maca, ginseng, ashwagandha, açai, reishi, maca, cacao o una mezcla de varios, este para estrés y apoyar tu función adrenal va muy bien.

Batidos para tus hormonas

Recetas de deliciosos batidos para tus hormonas

Ahora que tienes todos los pasos para crear tus propios batidos para tus hormonas felices, te dejo aquí mis recetas favoritas que te ayudarán a comenzar.

¿Por qué tengo infecciones urinarias?

infecciones urinarias recurrentes

Tener una infección urinaria (ITU) es una m, pero ¿sabes que es peor todavía? Tener infecciones urinarias una y otra vez. Sí, porque se pueden sufrir infecciones urinarias de forma crónica, y créeme que es muy incómodo. Quien las sufre, sabe de lo que hablo, visitas al baño constantemente y es bastante doloroso.

Desafortunadamente, muchas mujeres sufrimos de infecciones urinarias. De hecho, alrededor del 50 al 60 por ciento de las mujeres tienen al menos una en su vida y alrededor de un tercio de las mujeres requerirán tratamiento con antibióticos para una ITU a la edad de 24 años y muchas mujeres sufren de infecciones urinarias recurrentes.

Esa es la mala noticia. La buena noticia es que hay bastantes cositas que puedes hacer no solo para aliviar los síntomas de una UTI, sino también para reducir la probabilidad de necesitar antibióticos e incluso para prevenir que ocurran en primer lugar.

Infecciones urinarias recurrentes

¿Qué es una ITU?

Una ITU es una infección en cualquier parte de su tracto urinario. La infección generalmente comienza cuando las bacterias que normalmente se encuentran en los intestinos entran en la uretra, de donde sale la orina. En lugar de que la orina elimine las bacterias o que tu sistema inmunológico se defienda como se supone, las bacterias comienzan a colonizar el tracto urinario.

Llamamos cistitis a aquellas infecciones que permanecen en la vejiga, y uretritis a las que se dan en la uretra.

A veces, una ITU sigue reapareciendo, lo que se denomina ITU recurrente o ITU crónica. «La mayoría de la gente diría que una verdadera infección urinaria recurrente es cuando la sufres dos veces en seis meses o tres en un año».

¿Sabías que tenemos un microbioma urinario?

Seguramente hayas oído hablar del microbioma o microbiota intestinal, pero qué pasa con nuestro sistema urinario? Pues que tiene su propia microbiota.

El microbioma urinario está formado por diferentes especies de bacterias y puede diferir según la edad y el sexo. Los hombres tienen más probabilidades de tener Corynebacterium, similar al microbioma de la piel, mientras que un microbioma urinario femenino es más probable que tenga la bacteria Lactobacillus, similar al intestino.

Todavía no se sabe a ciencia cierta, pero estudios están demostrando que las infecciones urinarias se producen por una alteración de la microbiota urinaria. Esta alteración también puede provocar incontinencia urinaria.

Si quieres mantener tu microbioma urinario saludable

¿Cómo se mantiene sano el microbioma urinario?
Si te preocupa la salud de tu vejiga, se recomienda trabajar con un urólogo, un ginecólogo o un médico de atención primaria para encontrar un curso de acción personalizado. Los antibióticos a menudo se recetan a pacientes con infecciones del tracto urinario, y la uróloga Vannita Simma-Chiang, M.D., también recomienda opciones de tratamiento sin antibióticos, como suplementos de arándano o d-manosa.

Algunos estudios sugieren que los probióticos, en particular los que contienen Lactobacillus, pueden ser beneficiosos para las mujeres con infecciones urinarias recurrentes. * Aunque se necesitan más investigaciones, esto proporciona evidencia anecdótica de que los probióticos pueden ayudar a equilibrar la disbiosis en el microbioma urinario (o al menos en el microbioma vaginal), ya que lo hacen en el intestino. *

Síntomas recurrentes de las infecciones urinarias

¿Cómo saber si sufres una infección urinaria? Lo más probable es que sufras alguno de estos síntomas:

  • Unas ganas constantes y muy intensas de orinar
  • Una sensación de ardor al orinar
  • Orinar con frecuencia, en pequeñas cantidades
  • Orina turbia
  • Orina que parece roja, rosa brillante o marrón
  • Orina de olor fuerte
  • Dolor pélvico, especialmente en el centro de la pelvis y alrededor del hueso púbico.

Si la infección asciende por el tracto urinario y resulta en una infección renal, puede causar síntomas como fiebre alta, escalofríos, náuseas, vómitos y dolor en el costado.

Generalmente se diagnostica mediante una análisis de orina que presentará glóbulos blancos, glóbulos rojos o bacterias alterados.

Para saber exactamente qué bacterias están detrás de la ITU, hay que hacer un cultivo de orina. En caso de infecciones recurrentes se puede hacer una ecografía, una tomografía computarizada (TC) o una resonancia magnética (IRM) o incluso un tinte de contraste para resaltar partes de tu tracto urinario. Y por último se puede solicitar una cistoscopia, un tubo largo y delgado con una lente (llamada cistoscopio) que permite ver el interior de la uretra y la vejiga.

¿Por qué sufrimos infecciones urinarias crónicas?

Aunque todavía no se sabe a ciencia cierta por completo, se sugiere que un microbioma urinario alterado puede ser responsable del desarrollo de infecciones del tracto urinario (ITU), principalmente en las mujeres.

La causa más común de las infecciones urinarias son las bacterias, principalmente Escherichia coli, que son responsables de alrededor del 80 al 85% de todas las infecciones urinarias, pero los virus y hongos también pueden causar una infección. Hay un montón de razones que pueden causar infecciones crónicas, pero estas son las más comunes:

1. Ser mujer

Sí, tener vagina no nos ayuda. La razón es sencilla: la bacteria E. coli, que causa la mayoría de las infecciones urinarias, está presente de forma natural (y sana) en el tracto gastrointestinal (y en las heces), pero puede causar una infección si llega al tracto urinario. La anatomía genital femenina favorece que esta pueda viajar más fácilmente y rápidamente hasta el tracto urinario, pues la distancia entre el ano y la uretra es más pequeña que en el hombre. De ahí que seamos las mujeres las que sufrimos más de este tipo de infección.

2. Ser sexualmente activo.

Ser sexualmente activo es un factor de riesgo de infección urinaria. La penetración vaginal puede empujar algunas bacterias hacia el área uretral. De ahí la importancia de una buena higiene genital tras practicar sexo.

3. Estar en la menopausia.

Esto se debe a la disminución de estrógenos que sucede durante la menopausia. Esta deficiencia altera el tracto urinario de una manera que puede aumentar el riesgo de infecciones urinarias.

4. Ciertas condiciones médicas.

Si eres de las que presumes de que puedes aguantar mucho tiempo sin hacer pipí, lamento decirte que tienes más posibilidades de sufrir una infección urinaria. La orina estancada puede permitir que las bacterias causen infecciones.

Personas con una lesión en la médula espinal o daño en los nervios alrededor de la vejiga que pueden tener problemas para vaciar la vejiga, o alguien con un cálculo renal que bloquea el flujo de orina, también se verá afectado.

Otro ejemplo común es la diabetes, por tener un sistema inmunológico más débil, hace que se sea más susceptibles a las infecciones. Además, las bacterias pueden alimentarse de las cantidades excesivas de azúcar.

5. Ser propenso a las infecciones urinarias.

Por cuestiones genéticas, o herencia puedes ser más susceptible a infecciones urinarias.

Prevención y tratamiento de las infecciones urinarias recurrentes

Generalmente se recetan antibióticos para solventar esas infecciones esporádicas. Por lo general, una infección urinaria no es un gran problema y desaparece con antibióticos, pero si tienes infecciones urinarias recurrentes, tu médico puede sugerirte antibióticos en dosis bajas de manera regular. Pero hay que tener cuidado pues tomar antibióticos durante tanto tiempo puede causar efectos secundarios y alterar tu microbioma intestinal, lo que puede sabotear tu digestión, tu estado de ánimo, tus niveles de energía e incluso tu sistema inmunológico. Por lo que antes de zambullirte con los antibióticos de por vida, te recomiendo probar cambios en tu estilo de vida para prevenir infecciones urinarias recurrentes.

Lo mejor, es enfocarnos en la prevención, para así evitar estas infecciones tan molestas.

Hidrátate y vacía la vejiga con frecuencia

Puede parecerte demasiado simple. Pero la verdad es que beber suficiente agua y orinar de forma regular puede ayudar a eliminar las bacterias del tracto urinario y prevenir infecciones.

Además es aconsejable orinar especialmente después de mantener relaciones sexuales, pues con la penetración, se introducen bacterias que pueden llegar al tracto urinario. Si orinas después, ayudas a eliminar esas bacterias antes de que lleguen a tu vejiga.

Límpiate de adelante hacia atrás.

Así mantendrás la zona limpia y lejos del contacto de bacterias

Cámbiate de ropa interior a menudo

Especialmente después de un entrenamiento físico, de sudar mucho o de darte un baño en la piscina o en la playa.

Cambia tu anticonceptivo

Algunos métodos anticonceptivos, como preservativos tratados con espermicida, o diafragmas pueden incrementar la posibilidad de tener infecciones.

Evita productos de higiene femenina

Este tipo de productos pueden irritar tus genitales e incluso alterar tu pH vaginal y tu microbioma urinario, incrementando el riesgo de infecciones urinarias

Estrógenos

Si es menopáusica, estimular la producción de estrógeno es una opción para reducir la probabilidad de infecciones urinarias recurrentes.

Alimentación basada en plantas

Una alimentación más basada en plantas ha demostrado disminuir el riesgo de infecciones urinarias. La bacteria E. coli mencionada anteriormente, suele provenir de carne y ave, por lo que siguiendo una alimentación reducida en carne, evitas el riesgo. Si necesitas ayuda para hacer la transición a una alimentación más vegetariana, no dudes en escribirme a hola@mariallamas.com

Probioticos

El uso de probióticos puede mejorar tu sistema inmunológico, lo que puede ayudarte a prevenir infecciones, incluidas las infecciones urinarias. De hecho, un estudio encontró que tomar la bacteria beneficiosa Lactobacillus ayudó a reducir las infecciones urinarias recurrentes en un grupo de mujeres en aproximadamente la mitad.

Además de los suplementos, Incluye en tus platos más alimentos que te aporten una dosis de bacterias buenas, ayudando a fortalecer tu microbiota interna. Los encontrarás en alimentos fermentados como kimchi, sopa de miso, kéfir, kombucha o chucrut.

D-manosa

La D-manosa es un azúcar natural que se encuentra en alimentos como manzanas, arándanos y arándanos. La D-manosa es eficaz para prevenir las infecciones urinarias porque se sabe que se une a la bacteria E. coli (la causante de más del 80% de las infecciones urinarias) Y se asegura de que se eliminen a través de la orina, en lugar de adherirse a las paredes del tracto urinario. Un estudio probó los efectos de 2 gramos de D-manosa en polvo en 200 ml de agua al día durante 6 meses y encontró que redujo significativamente la incidencia de infecciones urinarias recurrentes y tiene menos efectos secundarios que los antibióticos comúnmente usado para las infecciones recurrentes.

Puede tomar D-manosa a diario en un vaso de agua para prevenir las infecciones urinarias; o, si sufres actualmente de una, puedes incrementar la dosis a una par de veces al día.

Arándanos rojos

Todavía no hay estudios sólidos respecto al tema, pero algunos dicen que los arándanos rojos contienen unas sustancias llamadas proantocianidinas, o PAC, que pueden ayudar a evitar que las bacterias se adhieran al revestimiento del tracto urinario y la vejiga, previniendo así las infecciones.

Personalmente, creo que el contenido de vitamina C del arándano y el contenido de D-manosa hace que tenga sentido utilizarlo como método de prevención de infecciones urinarias, así que si te funciona, sigue tomándolo. Puedes optar por tomarlo en zumo (sin azúcares añadidos) o también en suplemento.

Si contraes una infección urinaria, trata de no estresarte (¡esto solo empeorará la situación!). Prueba con D-manosa, un probiótico, asegúrate de una buena higiene íntima y coloca una almohada térmica en las áreas doloridas. También evitar los alimentos que irritan la vejiga, como el alcohol, la cafeína y los alimentos picantes y ácidos, y, por supuesto, beber mucha agua.

Las infecciones urinarias recurrentes requieren un enfoque de medicina verdaderamente funcional porque si no se tratan, pueden convertirse en una infección grave. Apuesta por hábitos que la prevengan, curen las puntuales y si fuese necesario recurre a los antibióticos.

¿Cómo afecta tu salud intestinal a tu desequilibrio hormonal?

desequilibrio hormonal

Ya he hablado anteriormente de la importancia sobre la salud digestiva y la salud hormonal. Pero ¿sabías que hay una conexión entre ambas y que el estado de una depende del de la otra y viceversa?

De hecho muchos desequilibrio hormonal comienzan en el intestino. Nuestra microbiota intestinal:

  • Alberga el 70-80% de nuestro sistema inmune, y si está inflamado puede ocasionar patologías autoinmunes o desequilibrios hormonales.
  • Contiene estroboloma, un grupo de bacterias responsables de metabolizar y eliminar los estrógenos del cuerpo.
  • Absorbe nutrientes para poder sintetizar hormonas.
  • Ayuda con la eliminación de toxinas y químicos para que haya un equilibrio hormonal.
  • Mantiene a raya los niveles de azúcar en sangre, esencial para que nuestras hormonas estén en equilibrio.
desequilibrio hormonal

¿Cómo afecta un intestino poco sano a tus hormonas?

Como has visto, nuestro intestino puede hacer cosas maravillosas cuando nuestra microbiota está en equilibrio. Pero en la vida moderna, estamos expuestas a montones de toxinas, químicos, alimentos procesados, medicinas, alcohol, estrés… que pueden echar al traste ese equilibrio, causando la conocida disbiosis, o que nuestras bacterias estén en desequilibrio.

Cuando esto ocurre podemos sufrir:

  • Intestino permeable: los nutrientes no son bien absorbidos y moléculas grandes atraviesan la pared intestinal causando inflamación, intolerancias, sensibilidad a la comida. Esto provoca una respuesta inmune que si no se trata puede llegar a provocar una falta de ovulación o que no produzcamos suficiente progesterona (infertilidad), que los estrógenos o testosterona estén sobre estimulados (reglas dolorosas, SOP, endometriosis) o pueden dificultar el funcionamiento de la tiroides (metabolismo, temperatura basal, cambios de humor…)

  • Deficiencias nutricionales derivadas de la mala absorción de los alimentos. Esta falta de vitaminas o minerales son las causas de algunos desequilibrios hormonales.

  • Mala conversión de la tiroides y estreñimiento: necesitamos una flora intestinal saludable para que consigamos suficiente T3, la forma activa de la tiroides que necesitamos para estar enérgicas, para un buen metabolismo, calor corporal y un sistema reproductivo estable (entre muchas otras cosas). Si tu intestino no está bien, puedes sufrir síntomas de hipotiroidismo incluso cuando tu tiroides está sana. Esto también provoca estreñimiento.

  • Exceso de estrógenos: el estroboloma es un conjunto de bacterias en la microbiota que se encarga exclusivamente de mantener en equilibrio tus estrógenos. Cuando el estrógeno no se metaboliza correctamente, no se elimina o se reabsorbe, se produce un desequilibrio. Se produce lo que llamamos una dominancia estrogénica, que está asociada con menstruaciones dolorosas y abundantes, fibromas uterinos, síndrome premenstrual, sensibilidad, bultos y quistes en los senos, e incluso cáncer de ovario, endometrio o de mama. De ahí que el equilibrio de estrógenos sea particularmente importante para la salud de la mujer. El estreñimiento provocado por la mala conversión de la tiroides también impide la eliminación de estrógenos, favoreciendo aun más esa dominancia estrogénica.

Causas y síntomas de un intestino poco saludable

Hay muchas causas, pero las más comunes son:

  • Estrés crónico
  • Alimentación basada en productos procesados y azúcares simples
  • Falta de fibra y poca verdura
  • Uso de anticonceptivos
  • Uso de antibióticos
  • Exposición a tóxicos (higiene corporal, cosméticos, limpieza del hogar…)
  • Mala higiene del sueño
  • Una vida sedentaria

¿Cómo sabes si tu intestino está bien o si puede estar fomentando un desequilibrio hormonal? Los síntomas más comunes son:

  • Hinchazón y flatulencias
  • Diarrea o estreñimiento o combinación de ambos
  • Acné u otros problemas cutáneos
  • Depresión o ansiedad
  • Fatiga crónica
  • Resfriados recurrentes
  • Infecciones recurrentes por hongos o levaduras
  • Dificultad para perder peso
  • Desequilibrio hormonal: Síndrome premenstrual, reglas muy dolorosas, irregulares o ausencia, dificultades para quedarte embarazada, SOP, endometriosis
ejercicio reduce el colesterol

¿Cómo mejorar la salud de tu intestino para corregir tu desquilibrio hormonal?

Estas son algunas de las cosas más fáciles y efectivas que puedes hacer, para mejorar tu salud intestinal y que equilibre a su vez tus hormonas y disfrutes de un ciclo menstrual saludable.

1. Alimentos densamente nutritivos

Come una gran variedad de alimentos ricos en proteínas de calidad, fibra y grasas saludables. Así te asegurarás de estar dando a tu cuerpo los nutrientes que necesita para producir hormonas saludables, además de optimizar la digestión, regular el azúcar en sangre y potenciar una buena salud intestinal, eliminando eficientemente las toxinas.

Céntrate en añadir una fruta o verdura y proteína diferente/nueva cada semana.

2. Come en función de las diferentes fases de tu ciclo

Esto ayudará a esas fluctuaciones hormonales aportándoles los nutrientes que necesitan. Además tu intestino no se verá sobreexpuesto a un alimento en particular que pueda causarle una respuesta inflamatoria. Echa un vistazo a este artículo para saber qué comer en cada fase.

3. Alimentación consciente

Comer en un sitio relajado y cuando estás presente permite a tu cuerpo entrar en su sistema nervioso parasimpático (el del descanso y la digestión) y absorber propiamente los nutrientes que comes (al contrario de lo que pasa cuando comes deprisa). Practica la alimentación consciente. Prueba a cenar sentada en la mesa, sin distracciones, sin televisión ni móvil. Relájate y disfruta de tu comida.

4. Incorpora prebióticos y probióticos

Super importante para potenciar las bacterias buenas del intestino y darles alimentos suficiente para su reproducción.

Fuentes de probióticos son chucrut, kéfir, kombucha, kimchi… pero también se puede tomar en suplementos (siempre bajo supervisión de un profesional)

Los alimentos ricos en prebióticos son los espárragos, plátanos macho, alcachofas, diente de león o avena por ejemplo.

5. Analiza

A veces, la única forma de saber realmente el estado de tu intestino es con un análisis. Normalmente animo a mis clientes a que se pongan en contacto con un profesional de la medicina integrativa que pueda analizar si tiene SIBO, disbiosis o parásitos. Conocer tu estado te ayudará a enfocarte en un tratamiento más efectivo y así recuperar tu salud intestinal y hormonal.

6. Evita desencadenantes inflamatorios

Siempre que puedas evita todas esas cosas que ya se ha demostrado fomentan la inflamación. Es decir evita o reduce el consumo de alcohol, azúcares refinados, harinas refinadas, grasas trans o hidrogenadas… Si puedes te animo a que consumas alimentos orgánicos o de km 0 para evitar toxinas que debilitan tu intestino y promueven la disbiosis.

7. Gestiona el estrés

Ya me has oído decir antes que el estrés crónico no es bueno, ¿pero sabías que es un detonante para los desequilibrios de la microbiota y las hormonas?

Es cierto que la vida siempre tendrá sus altibajos, pero te animo a que te pongas en el asiento del conductor y aprendas herramientas que te ayuden a manejar y gestionar con el estrés. Algunas de las técnicas más comunes son las respiraciones profundas, ejercicio, meditación, el contacto con la naturaleza o escuchar música, cocinar… Pero recuerda que las herramientas son siempre individuales. Lo que me puede desestresar a mi, a ti te puede poner de los nervios.

8. Tener una buena higiene del sueño

Un buen sueño está directamente relacionado con un equilibrio de la flora intestinal. Ya se que no es tan fácil, pero lo que realmente me ayuda a mi a dormir como un angelito es tener un pequeño ritual antes de dormir: cenas no muy pesadas, móvil fuera y aceite de lavanda.

También es interesante las actividades que podemos hacer durante el día como hacer ejercicio, dar un paseo por la tarde o una meditación corta.

9. Suplementación

La suplementación puede ser de gran ayuda, pero es cierto que no será tan efectiva como todo lo que hemos comentado antes. Sí, hay que poner todo eso en práctica y tener la suplementación como un añadido, un extra, un plus.

Algunos de esos suplementos que pueden ayudar a tu intestino y a resolver tu desequilibrio hormonal son probióticos, cúrcuma, glutamina, jengibre o zinc.

Te animo a que te pongas en contacto con un profesional antes de tomar nada, especialmente si estás con medicación o tienes alguna condición médica especial.

Conclusión

Cuanto más sano esté tu intestino, más sanas estarán tus hormonas, más empoderada te sentirás y mejor será tu ciclo menstrual.

Los pasos anteriores son cosas sencillas, naturales y efectivas que puedes poner en práctica desde ya, pero si sufres de síntomas persistentes te animo a que acudas a un profesional de la medicina integrativa o un dietista-nutricionista que pueda ayudarte a dar con la raíz de tu desequilibrio hormonal, tus problemas y te guíe hacia la sanación.

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Amenorrea hipotalámica, causas y soluciones

Lucía dejó de tomarse las pastillas anticonceptivas por su deseo de ser madre. Tuvo su sangrado por deprivación como era de esperar, pero luego pasaron tres meses sin señales de menstruación.

El médico le dijo que no se preocupase que era una amenorrea post-pildora y que era lo normal que no se preocupase. Pero la menstruación seguía sin venir y decidió pedir una segunda opinión.

Lucía era una mujer sana, hacía ejercicio de forma regular cada día, comía de forma nutritiva, no tomaba azúcares, ni procesados… ¿qué podría ir mal?

Buscando en internet se cruzó con el término amenorrea hipotalámica y algo le hizo click…

¿Qué es la amenorrea hipotalámica?

La amenorrea hipotalámica es más una condición, un síntoma, más que una patología en sí. Consiste en la ausencia de menstruación durante tres ciclos o más, y cuya causa no es debida a aspectos naturales (embarazo, lactancia, menospausia), toma de medicamentos o problemas de tiroides.

La regla no baja por un problema con el hipotálamo, el cual es la parte del cerebro que controla el sistema reproductivo. El hipotálamo percibe que algo no va bien en el cuerpo, entra en modo supervivencia y no está para destinar la energía que tiene en procrear o generar una nueva vida.

La amenorrea hipotalámica provoca un déficit de estrógenos, pérdida de cabello, uñas débiles, problemas de piel, baja líbido y sequedad vaginal. Muchos de estos síntomas son bastante habituales y al no ser graves se suelen pasar por alto. Hasta que la regla no te baja durante unos meses, entonces es cuando te empiezas a preocupar.

Y es que ya lo dicen, «»no lo quieres hasta que no lo tienes!!» Y es la ausencia la que nos hace echar de menos y desear aquello que quizás anteriormente nos resultaba molesto.

¿Qué puede causar la amenorrea hipotalámica?

Amenorrea hipotalámica y el ejercicio extremo

Ejercicio extremo

Hacer ejercicio es sinónimo de estrés para el cuerpo, y practicar más no es sinónimo de que sea mejor.

Cuando hacemos ejercicio por largos periodos de tiempo como carreras de una hora o más, o ejercicios de alta intensidad de forma muy continuada, los niveles de cortisol se incrementan. Si a esto le unimos problemas digestivos, falta de sueño, mala gestión emocional, desequilibrio en los niveles de azúcar, nuestro cuerpo acabará en un estado crónico de lucha o huye.

Es decir, que nuestros cuerpos constantemente estarán produciendo cortisol para lidiar con los estresores. Con el tiempo, el cuerpo no podrá mantener esa producción y comenzará a robar de nuestras hormonas sexuales para producir ese cortisol.

La clave es encontrar la cantidad de ejercicio adecuada para tu cuerpo, sin tener miedo a prácticas más relajadas como caminar o hacer yoga.

Una dieta baja en calorías y grasas

Necesitas grasas y necesitas comer suficientes nutrientes para que tu cuerpo pueda funcionar adecuadamente.

Las grasas, especialmente el colesterol y las grasas saturadas, son precursores de nuestras hormonas sexuales. Necesitamos grasa para producir hormonas.

Cuando no comes lo suficiente y además no ingieres grasas, tu cuerpo piensa que está en periodo de hambruna. Ralentiza el metabolismo para conservar energía y así poder sobrevivir. La fertilidad o reproducción de la especie humana no es importante en este estado, por eso no te baja la regla.

Nutrir tu cuerpo con grasas saciantes y suficientes calorías es imprescindible para recuperar esas hormonas y el equilibrio.

Un nivel alto de estrés

El estrés crónico puede ser por ejercicio físico extremo, pero también de índole emocional. Nuestro cuerpo no diferencia entre un estrés real de vida o muerte y un estrés mental por tener que pagar la hipoteca o por llevarnos mal con nuestro jefe.

Por lo que igual que hemos comentado antes que con el ejercicio extremo se produce un aumento de la producción de cortisol. Un estrés emocional, mental de forma continuada también impide que el hipotálamo libere hormonas reproductivas.

Genética

Nuestros genes determinan la sensibilidad de nuestros sistemas reproductivos a cambios en nuestros hábitos. De ahí que haya mujeres muy delgadas que no tengan ningún problema con su ciclo menstrual y otras pueden dejar de menstruar al perder peso.

Indagando un poco con Lucía, descubrimos que:

  • Había tenido siempre una mala relación con su imagen corporal y había conseguido perder 15 kilos hacía unos años a base de mucho esfuerzo.
  • Para cuidarse y no sufrir de colesterol, Lucía eliminó prácticamente todas las grasas de su alimentación.
  • Hacía ejercicio de forma extrema para calmar su estrés, para lidiar con situaciones emocionales que no sabía gestionar.
  • Es una persona muy exigente con ella misma y muy perfeccionista, esto afecta a su nivel de estrés y siente que la vida nunca era suficiente.
Amenorrea hipotalámica

¿Cómo conseguir que vuelva la menstruación?

Como has visto, hay muchos factores que afectan a una amenorrea hipotalámica, por eso el abordaje debe ser integral y debe cubrir todos esos factores.

Resumiendo muy rápido se basa en aportar a tu cuerpo muchos más nutrientes de lo que estás haciendo (sí, así es, hay que subir de peso si quieres volver a tener un ciclo menstrual sano), comer suficientes grasas saludables, modificar tu rutina de ejercicios, implementar prácticas para gestionar el estrés, de relajación, regular ritmos circadianos…

Lo entiendo, puede que piensas ¿en serio? Con todo el esfuerzo que he hecho para tener el cuerpo que tengo… ¿resulta que ahora tengo que renunciar a él?

Recobrar tu ciclo menstrual no es fácil, tienes que luchar contra todo lo que creías saludable hasta ahora.

Incrementarás tus ingestas, añadirás más aguacates, frutos secos, reducirás tus ejercicios, añadirás alguna sesión de yoga, subirás de peso y esto es un gran avance, pero puede que aun así no sea suficiente…

A veces hay que ir más allá, e incluso dejar de practicar todo tipo de ejercicio salvo salir a caminar y yoga. Deberás incrementar todavía más tu ingesta, subir todavía más de peso, ponerte a colorear para aliviar tu estrés y conseguir relajarte sin sentirte culpable…

Como ves nada sencillo para un perfil de persona autoexigente y perfeccionista. Pero es posible lograrlo, conseguir que tu ciclo menstrual vuelva de forma natural.

Es importante que el abordaje sea muy personalizado y único. Si te animas y quieres recobrar tu ciclo menstrual, no dudes en ¡escribirme a hola@mariallamas.com! juntas trabajaremos para que te sientas empoderada y te sea más fácil tomar decisiones que te ayuden a conseguir de nuevo el equilibrio.

Una cosa que ayuda bastante es, tener un claro objetivo final y para Lucía era sostener a sus futuros bebés en brazos. Eso hizo que cada kilo que subía, cada entrenamiento que se saltaba, mereciese la pena.

Lucía ha conseguido que le bajase la regla y dice que fue uno de los mejores días de su vida. Todavía no es seguro que pasará más adelante, si su ciclo volverá a resurgir, pero espera que su cuerpo decida confiar en ella de nuevo y que este inmenso paso que ha dado en su camino le lleve a la maternidad.

Sindrome de ovario poliquístico y Nutrición Intuitiva

En este artículo voy a compartir pautas basadas en una nutrición intuitiva que trabajo con mis clientas que han sido diagnosticadas con Síndrome de ovario poliquísticos. (SOP) En anteriores artículos explico qué es el SOP y porqué «pierde peso» es el peor consejo que te pueden dar.

Si tienes Sindrome de ovario poliquístico, tus dos objetivos principales deberían ser reducir la inflamación y mantener estables tus niveles de azúcar en sangre.

Como comentamos en artículos anteriores, no se sabe a ciencia cierta qué es lo que causa el Síndrome de ovarios poliquísticos, pero parece que la inflamación crónica hace que tus hormonas se alteren causando esos síntomas tan indeseados.

Cuando hablo de inflamación crónica, mucha gente se imagina directamente dietas antiinflamatorias en las que el azúcar, el gluten o los lácteos están prohibidos. Pero si miras de una forma más global, a todos los hábitos que influyen en la inflamación, comer un montón de verduras e ingredientes naturales y reducir las cantidades de azúcares añadidos es importante, pero hay otros factores también que afectan a la inflamación, tanto como la dieta.

Cómo comemos, nuestra calidad de sueño, los medicamentos, la salud digestiva, la genética, el ejercicio que practicamos… Por eso, este artículo no va solo de alimentación, porque sería solo una pieza del abordaje a utilizar en alguien que sufre SOP.

Tengo Sindrome de ovario poliquístico ¿qué hago?

Estas son algunas de las cosas que yo me centro con mis clientes que han sido diagnosticadas con SOP.

Come suficiente

Necesitamos asegurarnos que estás aportando a tu cuerpo la cantidad necesaria de nutrientes. Como hemos comentado el SOP puede ralentizar el metabolismo, por eso muchas mujeres con SOP experimentan una subida de peso inexplicable. Para intentar reducirlo, reducen las calorías y como el peso no baja, siguen reduciendo calorías. Cuando vienen a mi, me encuentro que comen muy poco causando un gran daño al metabolismo y salud tanto mental como física de la mujer.

El cuerpo y más el de una mujer, necesita grasa y proteína para producir hormonas y que funcionen con normalidad. Perder peso y dietas muy reducidas en hidratos suele ser lo recomendado a mujeres con Sindrome de ovario poliquístico, y aunque puedas notar una pequeña diferencia al principio, a largo plazo, la restricción de calorías e hidratos pueden causar mucho daño y que termines en el círculo del RESACON (restricción-atracón-culpa-vuelta a empezar)

Recurrencia de comidas

La resistencia a la insulina es el mayor reto en una persona con SOP. Las células responden peor a la insulina, la hormona que saca la glucosa de la sangre y la introduce en las células para que la use con energía. Cuando sufres de resistencia a la insulina lo que pasa es que tus células están hambrientas de energía, la cual se queda flotando en la sangre, pero no entra en las células que es donde se puede utilizar.

Si a esto le añades una dieta muy reducida en carbohidratos, tus células estarán desesperadas por glucosa. Sí, tu cuerpo comienza a desarrollar esos intensos antojos por cosas azucaradas.

Por lo que la respuesta no es eliminar los carbohidratos, es tomarlos de la forma adecuada. Pequeñas cantidades en las diferentes comidas del día. Y cuando hablo de carbohidratos no me refiero a comer solo pan y pasta, me refiero especialmente a frutas, tubérculos y otras verduras ricas en hidratos (patata, boniato, calabaza, remolacha, chirivía…) y también a cereales integrales y a legumbres.

Estos carbohidratos se caracterizan por descomponerse de forma más lenta, lo que hace que no te den picos de glucemia, si no que la glucosa se irá absorbiéndose de forma más paulatina y constante. Esto es muy beneficioso para las personas con resistencia a la insulina, porque el cuerpo va obteniendo pequeñas cantidades de glucosa durante más tiempo, reduciendo el riesgo de la montaña rusa del azúcar.

Si sientes que comes demasiado azúcar o productos refinados, trabaja con una dietista especializada en nutrición intuitiva que te ayude a que el reducir o limitar esa ingesta de azúcar no se traduzca en atracones posteriores.

Duerme

Tan importante como lo que hay en el plato es la calidad de tu sueño. Dormir poco y mal, incluso si es solo una hora menos de lo que necesitas, hace activar la respuesta del estrés, liberando una cascada de hormonas que producen inflamación.

La falta de sueño también se ha demostrado que afecta al metabolismo de la glucosa, ¿te has preguntado alguna vez porque estás tan hambrienta después de una mala noche?.

Por una noche no pasa nada, pero si de forma crónica duermes poco, es importante que comiences a cambiar el chip y comiences a trabajar en tu rutina de sueño. Seguro que sabes:

  • Evita tomar cafeína por la tarde-noche.
  • Apaga pantallas dos horas antes de irte a la cama.
  • Practica ejercicio al aire libre pues ayuda con los ritmos circadianos.
  • Haz de tu habitación un oasis (temperatura fresquita, a oscuras, en silencio, colchón cómodo)

Gestiona tu estrés

¡Ay el estrés! Lo tenemos tan normalizado que asusta… Sufrir estrés de forma crónica (por muy acostumbrada que digas que estás) afecta de forma directa a la habilidad que tiene tu cuerpo de regular la inflamación, la digestión, las hormonas. .

Ya sea estrés emocional, estrés físico, por nuestras finanzas… nuestros cuerpos están diseñados para gestionar estresores a corto plazo, no para vivir en situaciones prolongadas de estrés. Además las mujeres que sufren SOP tienen el estrés añadido de los síntomas. Cosas como la fatiga, el acné, la infertilidad, el vello facial… por no mencionar la ansiedad y depresión que puede ser un síntoma del Síndrome de ovarios poliquísticos.

Si tienes SOP, es importante que comiences a practicar técnicas que te ayuden a gestionar el estrés y no dudes en acudir a un psicólogo o terapeuta si fuese necesario.

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Sindrome de ovario poliquístico

Ácidos grasos Omega 3

Debido a la inflamación, las mujeres con Sindrome de ovario poliquístico probablemente necesiten cantidades superiores de omega 3. La alimentación es una buena forma de consumirlos, pero puede que si sufres SOP necesites de suplementación, por lo que habla con tu médico o dietista.

Aun tomando suplementación, siempre insisto en la importancia de añadir alimentos ricos en omega 3 como pueden ser:

  • El pescado azul, mejor de tamaño pequeño como las sardinas, anchoas, caballa, trucha o salmón.
  • Semillas de chía, lino y cáñamo son también buenas fuentes de este ácido graso inflamatorio.

Suplementación

Existen algunos suplementos que pueden ayudarte con los síntomas del SOP. Asegúrate de hablar con tu doctor o dietista antes de comenzar porque los suplementos pueden interactuar con otras medicaciones o entre ellos y porque tampoco deberías tomarte un cocktail de pastillas cada día.

Suele haber mucho estigma en cuanto a medicación, pero a veces los cambios de hábitos no son suficientes. Una vez que conoces los pros y contras, el 100% tu decisión. Recuerda que no eres mejor ni peor por que lo tomes o no lo tomes. La medicación está para cuando estás enferme y el Síndrome de ovarios poliquísticos es una enfermedad.

Aquí te dejo algunos de los más eficaces, pero depende mucho del tipo de SOP que tengas, de los síntomas que experimentes y de tus otros aspectos de salud.

Metformina: medicación convencional que ayuda a mejorar la resistencia a la insulina.

Myo-Inositol: medicina natural, mejora la sensibilidad a la insulina y corrige desajustes hormonales, promoviendo la ovulación.

Berberina: también recomendado para mejorar la resistencia a la insulina, mejorando marcadores metabólicos.

Resveratrol: potente antiinflamatorio que ayuda a reducir la absorción de glucosa y puede mejorar la respuesta de la insulina.

Vitamina D: esencial para las mujeres con Sindrome de ovario poliquístico. Ayuda también a mejorar la sensibilidad a la insulina.

Zinc: antiinflamatorio y protector.

Vitex agnus-castus: mejora la función adrenal, reduce niveles de prolactina que puede hacer reducir la producción androgénica adrenal. También ayuda a reducir la irritabilidad, depresión y ansiedad.

Magnesio: necesario para procesos relacionados con la actividad nerviosa y hormonal. Ayuda a mitigar el estrés y la ansiedad.

Espero que este post te ayude a abordar tu SOP y sus síntomas con estrategias que van más allá del «baja de peso». Estos puntos son los más importantes que trabajo con mis clientes, pero hay muchos más que puedes hacer con tu alimentación y estilo de vida. Si necesitas ayuda no dudes en contactarme y pedir ayuda.

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